domingo, 28 de marzo de 2010

Poco a poco te percatas de que la gente es la cosa más dicotómica del universo. La gente como ente abstracto de humanidad, vaya. En la misma semana, en el mismo lugar, puedes encontrarte a alguien que te hunde en la más profunda, oscura y densa miseria y a otro que te tira un salvavidas para sacarte de la pez, llenandose de mierda en el intento de sacarte.

Y te das cuenta de que el que te intenta ahogar es porque ya está demasiado hundido, dando brazas desesperadas, y que lo que no quiere es ahogarse solo. Asi que hazte/le un favor.



Prendele fuego hasta que arda y que su existencia brille al menos un instante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario